La situación de dependencia va ligada a la pérdida de capacidad para realizar las actividades de la vida cotidiana y diaria. A nivel mundial un gran número de personas son susceptibles de ser calificadas como dependientes. Sea cual se la causa, la tendencia del problema va en aumento. En España en aras a completar y fomentar la política social de nuestro país, la Ley 39/2006 de 14 de diciembre abre un horizonte nuevo para las personas que por su situación de vulnerabilidad necesitan de apoyo para realizar las actividades esenciales de la vida y alcanzar un mayor grado de autonomía personal y así poder ejercer plenamente sus derechos de ciudadanía. El abordaje de este tema se realiza desde un amplio abanico de profesionales que necesitan de una formación adecuada para configurar una atención multidisciplinar integral y específica.

Es por ello que este problema social y por tanto de todos los que conformamos la sociedad, necesita de una formación de postgrado multidisciplinar que unifique criterios y aúne esfuerzos conjuntos de profesionales.