Quién determina quién o quiénes
pueden acceder a un puesto de
trabajo no es la universidad, sino las instituciones empleadoras. Por
lo tanto, son dichas instituciones las que han de informarle de tales
extremos. En este caso es la Consejería de Educación la responsable de convocar las correspondientes oposiciones y establecer los requisitos para presentarse a las mismas.